Contaba Pascual Madoz a mediados del siglo XIX, “Esta villa tuvo algunas fortificaciones durante las guerras con Portugal en el siglo XVII, pero todas han desaparecido”(1). La zona ocupada por el Fuerte se encuentra en la actualidad rodeada por viviendas y huertos, y por la cara sur por el cementerio municipal, contiguo a la iglesia, y que intersecciona con parte del antiguo Fuerte como demuestra el baluarte del sureste, ocupado en su interior por algunas tumbas. Como elementos defensivos identificables en la actualidad, se encuentra el propio baluarte sureste, construido con mampostería de granito y sillares en el vértice, algunos lienzos de cortinas y un pequeño almacén situado al sureste. Los cilleranos siguen llamando al lugar "el Fuerte de la iglesia" en lugar de "el Fuerte" a secas, diferenciándolo de alguna de las otras fortificaciones situadas en en centro de la población y a las que hacía referencia Madoz; los nombres de algunas calles como “la Muralla” o “la Puerta Chica” nos dan alguna pista sobre su antigua ubicación.
(1) Diccionario
geográfico-estadístico-histórico de España y sus posesiones de
Ultramar – Pascual Madoz.